El kéfir de leche es una bebida fermentada tradicional conocida por su riqueza en probióticos y su sabor único. A continuación, te presento una receta sencilla para que puedas preparar kéfir casero en la comodidad de tu hogar.
Beneficios del Kéfir de Leche
- Mejora la digestión y la salud intestinal.
- Fortalece el sistema inmunológico.
- Es una fuente rica en nutrientes como proteínas, calcio y vitaminas del grupo B.
Ingredientes:
- Gránulos de kéfir
- Leche fresca (puede ser de vaca, cabra, oveja o incluso leche vegetal como almendra o coco)
Utensilios:
- Tarro de vidrio
- Paño o filtro de café
- Banda elástica
Como preparar kéfir casero:
- Preparación de la Leche: Calienta la leche hasta que esté tibia, pero no dejes que hierva.
- Enfriamiento: Deja que la leche se enfríe hasta alcanzar temperatura ambiente.
- Añadir los Granos de Kéfir: Coloca los granos de kéfir en un recipiente de vidrio y vierte la leche encima. La proporción típica es de 1 cucharada de gránulos por cada 1 taza de leche. Tapa el tarro con el paño o el filtro de café y asegúralo con la banda elástica.
- Fermentación: Cubre el recipiente con un paño limpio y deja que fermente durante 24 a 48 horas a temperatura ambiente. El tiempo de fermentación puede variar según la temperatura ambiente y la preferencia personal de la acidez del kéfir. Durante este tiempo, los gránulos de kéfir fermentarán la leche, convirtiéndola en kéfir.
- Cuidado con los Utensilios: Utiliza utensilios de plástico o madera para manipular los granos de kéfir y evitar reacciones con metales.
- Finalización: Una vez que el kéfir haya alcanzado el grado de fermentación deseado, cuela los granos de kéfir. Vierte el kéfir fermentado en un recipiente limpio para su almacenamiento en el refrigerador.
- Servir o Almacenar: Puedes consumir el kéfir inmediatamente o almacenarlo en el refrigerador.
¡Tu kéfir casero está listo para disfrutar! Puedes tomarlo solo o agregarle frutas, miel u otros sabores según tu gusto.
Consejos:
- La temperatura ideal para la fermentación es entre 20°C y 25°C.
- Si prefieres un kéfir más espeso, deja fermentar por más tiempo.
- Los granos de kéfir pueden reutilizarse para futuras preparaciones.
¡Y eso es todo! Ahora puedes disfrutar de tu delicioso kéfir casero lleno de probióticos y beneficios para la salud. Recuerda que puedes repetir este proceso tantas veces como desees para mantener un suministro constante de kéfir fresco en casa.
Otras bebidas fermentadas:
Foto de portada por Freepik
